La Romana.- Una tragedia estremeció al sector Villa Verde la mañana de este lunes, cuando fue hallado sin vida un niño de apenas dos años en el interior de su residencia. Según las autoridades, el menor fue presuntamente estrangulado por su propia madre.
El informe preliminar del médico legista Benito Kelly indica que el cuerpo del niño presenta signos evidentes de ahorcamiento. El cadáver fue trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) en San Pedro de Macorís, donde se realizarán los análisis correspondientes para confirmar la causa exacta del deceso.
La presunta autora del hecho fue identificada como Sobeida María Chala, madre del menor, quien actualmente se encuentra bajo custodia de la Policía Nacional para fines de investigación.
"Lo dejé viendo muñequitos anoche"
Carlos Manuel Félix, padre del niño, narró con dolor que había salido a trabajar la noche anterior y al regresar, alrededor de las siete de la mañana, fue recibido con la impactante noticia de que su hijo no respiraba.
“El niño lo dejé saludable, lo vi anoche por cámara viendo muñequitos. Nunca pensé que algo así pudiera pasar”, expresó entre lágrimas.
Félix relató que su pareja atravesaba episodios de ansiedad y tomaba medicamentos para calmarse, pero aseguró que nunca imaginó que podría hacerle daño al pequeño. Indicó que tenía tres hijos con la detenida y que siempre procuró mantener la estabilidad del hogar.
Dolor y consternación en la comunidad
Vecinos y allegados describieron al niño como un menor tranquilo, alegre y juguetón. La noticia ha generado conmoción en la comunidad de Villa Verde, donde muchos aún no pueden asimilar lo ocurrido.
Las autoridades han iniciado una investigación exhaustiva para esclarecer las circunstancias del hecho y determinar las responsabilidades conforme a la ley.
Este lamentable caso pone nuevamente en evidencia la importancia de atender adecuadamente los trastornos de salud mental en el entorno familiar, especialmente cuando hay menores de edad involucrados.
La comunidad de La Romana permanece en estado de duelo, mientras se espera el avance de las investigaciones para hacer justicia por la vida perdida de un inocente.